(De: Página Católica) ¿Francisco se pone al margen de la Iglesia? Como saben nuestros lectores, hace cerca de tres meses que este blog permanece en silencio por falta de recursos. Durante ese período, gravísimos acontecimientos han ocurrido en la Iglesia y en el mundo, causando escándalo y tristeza en muchos fieles.
Hoy volvemos momentáneamente a la palestra, porque acaba de acontecer en nuestro argentino suelo, y en una de sus provincias más tradicionalistas, un hecho cuyas funestísimas consecuencias difícilmente se puedan mensurar sin una profunda reflexión que no puede darse en una bitácora de estas características.
Sin embargo, por ser abominablemente contrario a la doctrina y moral católicas, por contar con el aval del obispo local y, hasta el momento, con el silencio de Roma, nos inclina a pensar, en primer lugar, que los desvaríos pontificios han tenido su coronación en él y, finalmente, que vale de confirmación a lo que veníamos entreviendo: la secta de los putos, combatida con alguna eficiencia por Benedicto XVI, está de vuelta. Ahora bien, empecemos por los hechos.
Desde hace unos días, se anunciaba por los medios que una pareja de homosexuales haría uso de la llamada Ley de Matrimonio Igualitario, para formalizar legalmente la situación que, según ellos, viven desde hace 29 años; lo cual no sería novedad a estas alturas en la Argentina, aunque pueda serlo en Santiago del Estero.
Pero lo que preocupaba seriamente a muchos católicos, e incluso a ciertos protestantes, es que el anuncio traía a su vez una nueva verdaderamente explosiva: luego del civil , la Iglesia Católica, por mano de uno de sus ministros, administraría el sacramento del matrimonio a la coyunda sodomítica. Lo remarcó el mismo protagonista al salir del Registro Civil "mañana vamos a celebrar nuestra unión a través de la religión en la parroquia Espíritu Santo".
Hoy volvemos momentáneamente a la palestra, porque acaba de acontecer en nuestro argentino suelo, y en una de sus provincias más tradicionalistas, un hecho cuyas funestísimas consecuencias difícilmente se puedan mensurar sin una profunda reflexión que no puede darse en una bitácora de estas características.
Sin embargo, por ser abominablemente contrario a la doctrina y moral católicas, por contar con el aval del obispo local y, hasta el momento, con el silencio de Roma, nos inclina a pensar, en primer lugar, que los desvaríos pontificios han tenido su coronación en él y, finalmente, que vale de confirmación a lo que veníamos entreviendo: la secta de los putos, combatida con alguna eficiencia por Benedicto XVI, está de vuelta. Ahora bien, empecemos por los hechos.
Desde hace unos días, se anunciaba por los medios que una pareja de homosexuales haría uso de la llamada Ley de Matrimonio Igualitario, para formalizar legalmente la situación que, según ellos, viven desde hace 29 años; lo cual no sería novedad a estas alturas en la Argentina, aunque pueda serlo en Santiago del Estero.
Pero lo que preocupaba seriamente a muchos católicos, e incluso a ciertos protestantes, es que el anuncio traía a su vez una nueva verdaderamente explosiva: luego del civil , la Iglesia Católica, por mano de uno de sus ministros, administraría el sacramento del matrimonio a la coyunda sodomítica. Lo remarcó el mismo protagonista al salir del Registro Civil "mañana vamos a celebrar nuestra unión a través de la religión en la parroquia Espíritu Santo".
Y el mañana finalmente llegó: un señor vestido de novia, con blanco traje nupcial y acompañado por otro hombre, se presentó a las 21 hs del pasado sábado en la parroquia mencionada, donde el padre Sergio Lamberti efectuó la ceremonia prometida.
También pueden acceder a: Infocatólica
Es una verdadera aberración. Esperemos que Francisco tome medidas severas contra estos, que él mismo puso en ese lugar, como supuestos pastores. De lo contrario estará abiertamente intentando ser el Anticristo y, estaría además conduciendo la barca de Pedro hacia el Abismo.
ResponderEliminar